jueves, 28 de noviembre de 2019

Dios te libra de tus enemigos

Dios te libra de tus enemigos
Dios te libra de tus enemigos
(Dios nos libra de nuestros enemigos). El pueblo de Israel salió de Egipto hasta llegar frente al Mar Rojo, el ejército egipcio viene para atacarlos y ellos no saben qué hacer. Algunos se llenan de miedo, otros de enojo, otros viven frustración, etc, todos reaccionamos de manera diferente ante una crisis, pero lo correcto es buscar a Dios y confiar en él…  



a)  Escucha el consejo de Dios y avanza. Éxodo 14:13-15.

“Y Moisés dijo al pueblo: No temáis; estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros; porque los egipcios que hoy habéis visto, nunca más para siempre los veréis. Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos. Entonces Jehová dijo a Moisés:  ¿Por qué clamas a mí?  Di a los hijos de Israel que marchen". 

Ante el desespero y la angustia siempre la mejor opción es buscar a Dios, y él misericordioso se dejará hallar y traerá siempre palabras de fortaleza y ánimo. Por eso Moisés habla de parte de Dios diciendo: “No temáis, estad firmes, y ved la salvación que Jehová hará hoy con vosotros”.

Dios le promete a Israel que nunca más vería a aquel poderoso ejército persiguiéndolo, nunca más vería al enemigo egipcio. Cuando sigues a Dios y perseveras confiando en su poder y cuidado, él no te dejará avergonzado, y tus enemigos no prevalecerán porque quien se ha levantado para pelear por ti se llama Jehová de los ejércitos.        

Las palabras de Moisés en el versículo catorce: “Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis tranquilos”, nos recuerdan no sólo que en el Señor estamos seguros, sino que además al confiar en él y en su protección nuestro corazón experimentará la paz y la tranquilidad de saber que todo está en las manos poderosas de Dios y que por encima de él no hay nadie.   

El versículo quince nos enseña que hay momentos donde debemos orar y hay momentos en los que debemos actuar y avanzar. No era el momento de reflexionar o descansar junto al mar, era el momento de avanzar contra los obstáculos y a pesar de la oposición.

El Mar Rojo no había sido abierto todavía, pero Dios ya había dado la orden de marchar, esto nos recuerda la importancia de avanzar por la fe. Tal vez no lo veamos, pero sí Dios lo dijo, así será.    

b)  Persevera, Dios hará milagros a tu favor. Éxodo 14:19-20.

“Y el ángel de Dios que iba delante del campamento de Israel, se apartó e iba en pos de ellos; y asimismo la columna de nube que iba delante de ellos se apartó y se puso a sus espaldas, e iba entre el campamento de los egipcios y el campamento de Israel; y era nube y tinieblas para aquéllos, y alumbraba a Israel de noche, y en toda aquella noche nunca se acercaron los unos a los otros". 

Varias cosas suceden aquí, veamos en detalle cada una de ellas:  

Según el versículo diecinueve el ángel de Dios que marchaba delante de Israel por el desierto vino y se puso detrás de ellos. El pueblo de Israel siempre contó con la presencia de este ángel poderoso quien iba delante para proteger a los hebreos, y actuaba de acuerdo a las circunstancias, en este caso viene y se ubica detrás de Israel ya que su enemigo viene para alcanzarlo y destruirlo.  

Lo mismo sucedió con la columna de nube que iba delante de ellos, ésta vino y se puso a sus espaldas. Dios utiliza diversos y poderosos medios para proteger a su pueblo y llevarlo al cumplimiento de su plan, es decir introducirlos en la tierra de la abundancia.      

El versículo veinte nos enseña que aquella nube se ubicó en el medio entre el ejército egipcio que perseguía y el pueblo de Israel que marchaba, y aquella nube era para los egipcios tinieblas, y era luz para el pueblo de Dios, durante toda aquella noche nunca los egipcios se acercaron a  los hebreos.  

Debemos tener en cuenta que un ejército de miles de soldados egipcios perseguía a Israel, nos dicen los versículos siete y nueve que Faraón escogió seiscientos carros, toda la caballería y todo su ejército, pero a pesar de sus veloces carros y sus veloces caballos nunca alcanzaron al pueblo de Israel que marchaba a pie. Esto fue una protección sobrenatural que solo nuestro poderoso Dios puede hacer.  



c)   Dios es todopoderoso y soberano. Éxodo 14:21.

“Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas”.

El versículo veintiuno nos enseña que un viento recio sopló toda aquella noche, volvió el mar en seco, y las aguas quedaron divididas, y el pueblo de Israel entró por en medio del mar en seco teniendo las aguas como muro a su derecha y a su izquierda.

El ejército egipcio los siguió hasta la mitad del mar y allí Dios trastornó el campamento de ellos, quitó las ruedas de sus carros, y los soldados de Egipto se llenaron de temor y dijeron: “Jehová pelea por ellos, huyamos” y Dios dijo a Moisés “extiende tu vara”, y entonces el mar se volvió en toda su fuerza y así fueron destruidos los carros de la caballería egipcia, y murió todo el ejército de Faraón, dice la Biblia, que no quedo de ellos ni uno (Éxodo 14:23-28).    

Cuando el Faraón pensó que el pueblo de Dios estaba acorralado, cuando creyó que los podía capturar y volver a esclavizar, el Señor movió su poderosa mano otra vez, y el enemigo cayó. Dios está de tu lado, cree, persevera, fortalécete en Dios y no dejes de avanzar, él hará milagros a tu favor, él hará cosas por ti que nadie más puede hacer.      
Conclusión: Como podemos ver ante aquella gran dificultad Dios mostró su gloria como en ninguna otra parte de las Escrituras. A mayor grandeza de tu obstáculo mayor gloria de Dios se manifestará a tu favor; a mayor altura de tu enemigo mayor poder del Señor se moverá a tu favor.  



Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.   

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