Introducción: Dos hermanos
tenían un ahorro y vieron un plantío de vides que estaba a la venta. Conversaron
con el dueño, y le preguntaron ¿Por qué lo vende? -Lo compré porque decían que
aquí había un tesoro, lo busqué y no lo encontré, y ahora quiero irme a probar
fortuna. -¿Si compramos el plantío y hallamos el tesoro será nuestro? -Dudo que
aparezca, pero hagamos el trato.
Cuando tomaron posesión del terreno, todas las
plantas y vides estaban marchitas. Retiraron toda la basura y hojas secas
acumuladas. Humedecieron la tierra y empezaron a cavar. Pasaron varios meses y el
tesoro no aparecía, y transcurría el tiempo sin éxito. Pero notaron cambios, por
una parte, ellos se habían vuelto más fuertes, las vides comenzaron a dar
grandes racimos de uvas. Un día llevaron las uvas al mercado y lograron
venderlas bien. Pronto recuperaron el costo del plantío, y siguieron ganando
más. Con el tiempo supieron cuál era el tesoro oculto en aquel terreno. Siempre
la perseverancia será recompensada. Persevera, Dios te recompensará…
CUANDO CREES QUE TODO ESTÁ PERDIDO
I. EN
LA PRESENCIA DE DIOS HAY RESTAURACIÓN
A. El
pasado no sanado, impide el fluir de Dios en el presente.
Nota: Es necesario mirar un
poco el pasado de Moisés:
1. Había
fracasado en su primer intento de liberar a sus hermanos (Hch. 7:23-25).
2. Huye,
aislándose del plan de Dios (Hch. 7:26-29, quizá no podía perdonarse a sí
mismo, quizá no quería ser rechazado nuevamente, Moisés se fue a “tierra de
Madián” y Madián significa: Reprensión, juicio, regaño o reprensión, cobertura;
en éste ambiente estaba y vivía Moisés).
3. Su
autoestima ha sufrido un gran daño (por eso cuando Dios lo llama le responde:
“¿Quién soy yo para que vaya a Faraón, y saque de Egipto a los hijos de Israel?
y otras excusas más…).
4. Volver
al propósito de Dios, no forma parte de su plan de vida.
Adquiere ahora sin costo alguno nuestro libro cristiano, un texto que edificará tu vida y la de aquellos que te rodean. Aquí en: GRATIS LIBRO CRISTIANO.
B. Dios
viene al encuentro de moisés (Éx. 3:1-6).
Nota: En ésta porción de la Escritura podemos ver
cosas muy importantes:
1. Dios
no es Dios de casualidades, Moisés llegó hasta Horeb, monte de Dios (Horeb
significa: desierto, desolado, soledad, montaña del terreno seco. Dios requiere
un corazón en calma para hablarle).
2. Se
le aparece Dios mismo en una llama de fuego en una zarza (Dios sabe cómo atraer
nuestra atención).
3. “Quita
el calzado de tus pies”, los zapatos hacen referencia al caminar de Moisés (Sus
pies empolvados quedan expuestos ante Dios. Sus zapatos que lo habían llevado
por otro camino, quitárselos significa “despojarse de…”).
II. DIOS
RENUEVA LA VISIÓN
A. Dios
desea una prosperidad integral para sus hijos
Nota: Cuando observamos la
Escritura y el plan redentor en Cristo, vemos que la salvación es integral, que
la prosperidad de Dios para sus hijos involucra todas las áreas, pues la
victoria de Jesús en la cruz fue completa, Cristo redimió al ser humano en su
integridad: espíritu, alma y cuerpo.
B. La
visión de Dios es ilimitada y misericordiosa (Éx. 3:7-9).
Nota:
Dios conoce, ve y escucha el dolor de su pueblo, Moisés y el pueblo de
Israel habían perdido la esperanza de libertad, de cambio de vida. Con
frecuencia el pensamiento del ser humano difiere mucho del pensamiento divino,
aquí vemos que mientras ellos pensaban en seguir cómo esclavos, Dios ya estaba
dando inicio a su plan de liberación, por eso dice la Biblia:
“Como son más
altos los cielos que la tierra, así son más altos mis pensamientos que los
vuestros”, por amor hacía su pueblo, no sólo los liberaría de la esclavitud,
sino que los llevaría a una tierra buena y ancha, tierra dónde fluye leche y
miel, de las tierras conocidas, Dios los llevaría a la mejor. Dios tiene el
poder de cambiar y transformar todas las cosas.
III. DIOS
LE RECUERDA A MOISÉS EL LLAMADO
A. A
Moisés se le recuerda el diseño divino (Éx. 3:10).
Nota:
Dios
le recuerda a Moisés los planos celestiales diseñados para su vida… Algo así
como: “has sido diseñado para ser un libertador (no sólo de personas, sino
además de ciudades y pueblos, eres equipado con autoridad y señales
sobrenaturales para liberar una nación).
B. Dios
quiere darnos la victoria sobre nuestros miedos, para sacar a otros de su
cautiverio.
Nota: Es interesante que
Moisés debe volver al lugar de donde huyó, e ir a enfrentar la figura que
temía: el faraón (Moisés debía enfrentar sus miedos y con la ayuda de Dios
vencer), pues no era posible sacar del cautiverio a Israel, si primero él no
salía del suyo.
Moisés
dirigía ovejas por el desierto, pero ahora debía dirigir todo un pueblo a la
tierra prometida, ahora él saldría del anonimato y se convierte (en el proceso
y tiempo del Señor) en un gran instrumento para Dios, Deut.
34:10-12.
Conclusión: Dios
nos creó a todos con un gran propósito, sin embargo por ofensas, heridas,
pecados o rebelión, aparece el estancamiento, los miedos, la auto condenación,
etc. Pero, Dios viene a tu encuentro a restaurar, a renovar y a recordarte tu
diseño, fuiste creado para un gran plan. Cuando crees que todo está perdido,
Dios da comienzo a su poderosa obra.
(Escrito
por Pastor Gonzalo Sanabria)
Te
invitamos a leer:
0 comentarios:
Publicar un comentario