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SERMONES ESCRITOS LISTOS PARA PREDICAR
. . Sermones escritos listos para predicar - para predicar. A continuación ponemos a tu disposición un listado de sermones escr...
viernes, 31 de enero de 2020
(Dios desea bendecirte con abundancia).
La palabra de Dios nos enseña de manera abundante acerca de las bendiciones que
el Señor desea dar a sus hijos, él ha planeado una prosperidad integral, y esto
incluye las bendiciones financieras.
El diseño de Dios nunca
puede ser quebrantado, cuando caminamos en los mandamientos del Señor inevitablemente
seremos bendecidos, tal como está escrito, pues Dios cumple todo lo que ha dicho.
Te invito a leer este valioso tema:
Dios desea bendecirte con abundancia:
Deuteronomio 26:1-2 “Cuando
hayas entrado en la tierra que Jehová tu Dios te da por herencia, y tomes
posesión de ella y la habites, entonces tomarás de las primicias de todos los
frutos que sacares de la tierra que Jehová tu Dios te da, y las pondrás en una
canasta, e irás al lugar que Jehová tu Dios escogiere para hacer habitar allí
su nombre”.
1) En primer lugar debemos tener
presente es el significado de la palabra “primicia”, éste término se traduce en
la Biblia desde dos palabras hebreas: “bikkurim”: Primeros frutos; y la segunda
es “Reshít” que significa: parte principal o mejor parte. De donde podemos
concluir que primicia no es sólo la parte primera, sino además, la mejor
parte.
La tradición hebrea nos enseña que el
agricultor salía a observar sus campos y sus respectivas cosechas, así como sus
rebaños. Los primeros frutos o primeras crías y aquellos de mejor calidad eran
señalados con una cinta de color y cuando estaban en su mejor punto eran
recolectados para ser llevados a la casa de Dios.
2) En segundo lugar la Biblia nos enseña
que tres veces al año el pueblo de Dios presentaba sus primicias: Éxodo 34:22 “También
celebrarás la fiesta de las semanas, la de las primicias de la siega del trigo,
y la fiesta de la cosecha a la salida del año”. Cada una de estas fiestas se correspondía con cada una de las
cosechas principales del año que Israel tenía, estas son:
La fiesta de la Pascua con la cosecha
de la cebada.
La fiesta de Pentecostés con la
cosecha del trigo.
La fiesta de Tabernáculos con la
cosecha de la uva.
En cada una de estas fiestas los
israelitas venían al templo trayendo sus primicias o primeros frutos de sus
labores.
3) En tercer lugar debemos preguntarnos:
¿Por qué el pueblo de Dios presentaba sus primicias al Señor? Son varias las
razones, todas ellas importantes, algunas de estas con:
Gratitud, reconocimiento y honra, obediencia
al diseño divino, y como semilla para bendición, porque recordemos que la
Biblia nos enseña que dar con generosidad abre los cielos.
Podemos también ver por ejemplo en 2
Crónicas 31:5 “Y cuando este edicto fue divulgado, los hijos de Israel dieron
muchas primicias de grano, vino, aceite, miel, y de todos los frutos de la
tierra: trajeron asimismo en abundancia los diezmos de todas las cosas”.
En el contexto de este pasaje bíblico
se nos enseña que el rey Ezequías promovió un despertar por las cosas de Dios
en el pueblo de Israel, restauró el templo y el culto al Señor, y dictó una ley
mediante la cual el pueblo debía traer sus diezmos y primicias al templo, cosa
que con diligencia y mucho gozo obedeció el pueblo del Señor.
La Biblia nos enseña que aquella acción
de volverse a Dios, hacer culto al Señor y dar sus diezmos y primicias hizo que
se activasen múltiples bendiciones sobre la nación y sobre el rey Ezequías:
Nos dice 2 Crónicas 31:20-21 “De esta
manera hizo Ezequías en todo Judá, y ejecutó lo bueno, recto y verdadero,
delante de Jehová su Dios. En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa
de Dios, de acuerdo con la ley, buscó a su Dios, lo hizo de todo corazón, y fue
prosperado”. Dios es fiel y cumple sus promesas con amor y poder, él derrama abundancia
de bendiciones sobre nuestros hijos.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- Dios desea bendecirte con abundancia -
jueves, 30 de enero de 2020
(Cuidado con la ruina y el
hombre armado). Introducción: Es muy importante tener certeza bíblica de las
cosas que hacemos. Cuando caminamos en la palabra de Dios podemos estar seguros
del respaldo y bendición del Señor.
Dios respalda su palabra,
no nuestros argumentos o ideas, él cumple su palabra con absoluta fidelidad. A
través de la Biblia se nos enseña que la voluntad de Dios es bendecirnos aun en
las finanzas; debemos entonces tener en cuenta los principios que el Señor nos
enseña al respecto. Veamos ahora este importante estudio:
Cuidado con la ruina y el hombre armado.
Proverbios 6:9-11 y 24:30-34 “Perezoso, ¿Hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo
te levantarás de tu sueño” un poco de sueño, un poco de dormitar, y cruzar por
un poco las manos para reposo; Así vendrá tu necesidad como caminante, y tu
pobreza como hombre armado”.
1) En primer lugar nos enseña
este pasaje que la pereza, negligencia y descuido genera ruina, escasez,
fracaso y empobrecimiento. La pereza es productora de escasez y ruina.
La palabra de Dios nos
enseña de manera abundante acerca de las finanzas y cuando ponemos por obra su
palabra somos inevitablemente bendecidos. Es fundamental que estudiemos las Sagradas
Escrituras por el Espíritu Santo, y no nos quedemos sólo con la letra, pues el
que inspiró la Biblia fue el Espíritu Santo de Dios, y es él quien nos da la
revelación de ellas.
Pero sabemos por la misma
Escritura que la pereza no es lo único que genera ruina y escasez, por ejemplo
el Salmo 106:36 nos dice: “Y sirvieron a sus ídolos, los cuales fueron causa de
su ruina”. La avaricia es un ídolo que produce ruina y escasez. La idolatría genera
fracaso y hambre.
2) En segundo lugar podemos
ver que el hombre armado del que nos habla Proverbios viene por diversas
razones; es un ser demoníaco que genera ruina, es decir, él ataca
específicamente los bienes, patrimonio y capacidad de trabajo del cristiano
(hablamos de los dones, talentos, habilidades que el Señor le ha dado a sus
hijos para avanzar y prosperar).
Pero en Cristo somos más que vencedores y con el poder y sabiduría del Señor debemos reprender las obras de las tinieblas y conquistar lo que Dios nos ha prometido
3) En tercer lugar debemos
tener presente que así como éste ser demoníaco ("hombre armado") tiene armas para traer ruina,
Dios nos da armas o herramientas para ser prosperados y bendecidos.
Algunas de estas herramientas son: la obediencia, la buena
administración, dar nuestros diezmos y ofrendas, nuestras siembras y primicias,
ser diligentes y excelentes en lo que hacemos, ser honestos en los negocios, entre
otras cosas que nos enseña la Escritura.
Puede ser como nos enseña
la Biblia que este “hombre armado” se denomine: demonio, ángel caído,
devorador, etc, sin importar su categoría espiritual debe sujetarse a las leyes
de Dios, es decir, si cumplimos los mandamientos de Señor, incluyendo los
financieros, no podrá tocar nuestras finanzas y nosotros caminaremos bendecidos
por Dios.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- Cuidado con la ruina y el hombre armado -
miércoles, 29 de enero de 2020
(Jesús nos enseña el
poder de la oración). La Biblia nos enseña y anima continuamente a perseverar en
la oración; grandes victorias se consiguieron mediante el clamor con fe de los
hijos de Dios. Por eso el Señor Jesús nos enseña sobre el poder e importancia
de orar.
Con frecuencia ante las
dificultades y obstáculos puede aparecer el desánimo y descuidamos la oración,
pero la voluntad del Señor es que perseveremos en ella, la oración es una
poderosa arma de Dios para caminar en victoria. Veamos ahora este interesante
estudio:
Jesús nos enseña el poder de la oración:
Lucas 11:5-8 “Les dijo
también: ¿Quién de vosotros que tenga un amigo, va a él a medianoche? Y le
dice: Amigo, préstame tres panes, porque un amigo mío ha venido a mí de viaje,
y no tengo qué ponerle delante; y aquél, respondiendo desde adentro, le dice:
No me molestes; la puerta está cerrada, y mis niños están conmigo en cama; no
puedo levantarme y dártelos?
Os digo, que aunque no
se levante por ser su amigo, sin embargo por su importunidad se levantará y le
dará todo lo que necesite”.
1) En primer lugar debemos tener en
cuenta que este capítulo empieza diciéndonos que el Señor Jesús estaba orando
en cierto lugar y sus discípulos vinieron a él y le dijeron: “Enséñanos a
orar”. En aquel momento el Señor los instruyó con un bosquejo de oración
llamado el Padre nuestro, oración muy conocida que nos muestra las líneas principales
que podemos tener en cuenta cuando vamos a orar.
En este pasaje de Lucas 11:5-8
observamos varias cosas muy importantes que el Señor Jesús enseñó acerca de la
oración y su poder:
A través del ejemplo de los dos
amigos, nos enseña Jesús la necesidad de la oración perseverante. Aquel
clamor que nunca renuncia, aquella oración que no se queda a mitad de camino,
aquel clamor que toca la puerta de Dios una y otra vez y lo hace hasta alcanzar
la respuesta.
2) En segundo lugar Jesús enseña sobre
el poder de la importunidad. En el ejemplo de los dos amigos, textualmente nos
dice el Señor que “aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, por su importunidad
se levantará y le dará todo lo que necesite”.
El término “importunidad” se traduce
de la palabra griega “anaideia” que además significa: insolencia, osadía,
persistencia. La palabra “a - naideia” está compuesta por: “a” que es un
negativo, y por “aidos” que significa: vergüenza, modestia, es decir pide al
señor “sin modestia, sin vergüenza” él es tu Padre y puedes pedirle con
confianza y seguridad
3) En tercer lugar podemos concluir que
sí la desvergonzada persistencia logró el favor de un vecino, con toda
seguridad la oración ferviente recibirá poderosas respuestas de nuestro Padre
celestial, Dios es fiel, bueno y tiene cuidado de sus hijos.
Por eso pide a Dios con
confianza como un hijo le pide a su padre terrenal, y tu Padre celestial se
ocupará de la repuesta, la cual será sobrenatural y poderosa. La oración que persevera
verá resultados sobrenaturales, milagros y respuestas divinas que de ninguna
otra manera serian posibles.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- Jesús nos enseña el poder de la oración -
martes, 28 de enero de 2020
(La oración de Jabes). La
palabra de Dios es clara y nos enseña la importancia y necesidad de encomendar al
Señor los anhelos de nuestro corazón. No sólo necesitamos de él su bendición,
sino su aprobación.
Dios es fiel y tiene
cuidado de sus hijos, por eso él desea ser la prioridad en nuestras vidas pues
esto es lo que garantiza su respaldo y bendición en cada uno de nuestros proyectos
y planes. Orar es mostrar a Dios que dependemos de él. Veamos este interesante
estudio:
La oración de Jabes:
1 Crónicas 4:9-10 “Y Jabes
fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por
cuanto lo di a luz en dolor. E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: Oh, si
me dieras bendición, y ensancharás mi territorio, y si tu mano estuviera
conmigo, y me librarás de mal, para que no me dañe. Y le otorgó Dios lo que le
pidió”.
1) En primer lugar se destaca como nos
dice la Biblia que Jabes fue un hombre que llegó a ser más ilustre, importante
y distinguido que sus hermanos, su madre tuvo problemas en el momento del
parto.
Al parecer Jabes nació
en un parto seco, es decir, con poco líquido amniótico, lo que hizo difícil el momento
del alumbramiento o parto.
2) En segundo lugar no sabemos si por
aquel difícil momento Jabes quedo con alguna discapacidad o dificultad física,
lo cierto es que él no era importante, ni distinguido, ni estaba bendecido
materialmente hablando, pero un día decidió clamar a Dios y aquella oración
transformó su vida en todos los aspectos de una manera maravillosa.
Jabes pidió a Dios su bendición, su
protección y expansión de su territorio; y la Biblia nos dice que “le otorgó
Dios lo que le pidió”. Fue una oración que transformó su vida presente y su
vida futura. A partir de aquel momento Jabes empezó a cosechar las bendiciones
que se alcanzaron a través de aquella oración.
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3) En tercer lugar vemos que el Señor
honró de manera especial la fe de Jabes. La bendición y el respaldo de Dios
sobre su vida fue tal que él llegó a ser ilustre, importante y distinguido.
Como podemos ver Jabes no se limitó a
pedir a Dios sólo la bendición material, él también le dijo al Señor: “líbrame
del mal para que no me dañe”. Su deseo no sólo era ser prospero, él quería
caminar con Dios, y evitar todo camino de maldad.
Jabes logró entender
que el cambio de su vida estaba en las manos de Dios, que lo que él debía hacer
era acercarse al Señor con fe y sinceridad en su corazón, pues a Dios no lo
podemos engañar. El Señor escucha y responde el clamor sincero de sus hijos
No pidamos al Señor sólo cosas
materiales, pidámosle un corazón que lo ame y siga su camino fielmente toda la
vida. Busquemos a Dios y pidámosle con sabiduría, y él nos concederá los deseos
de nuestro corazón: “Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las
peticiones de tu corazón” Salmo 37:4. Gracias Dios por tu amor y bondad.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- La oración de Jabes reflexión -
lunes, 27 de enero de 2020
(El sometimiento a Dios
es una poderosa bendición). Introducción: La palabra de Dios es clara y someternos al Señor siempre
traerá los mejores resultados a nuestra vida y también para la vida de aquellos
que nos rodean.
El orgullo y la
autosuficiencia, o el creer que podemos lograr las cosas por nuestras propias
fuerzas o capacidades nos hacen perder las bendiciones que Dios ha diseñado
para nuestra vida. Someternos a la voluntad de Dios antecede grandes
bendiciones y victorias. Veamos ahora este valioso estudio:
El sometimiento a Dios es una poderosa bendición.
2 Reyes 5:13-14 “Más
sus criados se le acercaron y le hablaron diciendo: Padre mío, si el profeta te
mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y
serás limpio? El entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme
a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño,
y quedó limpio”.
1) En primer lugar vemos que Naamán, el
general sirio, lleno de enojo por no ser atendido personalmente por el profeta
Eliseo decide volver a su tierra. Pero, según el versículo trece sus criados le
hablaron para hacerlo entrar en razón y finalmente el general escucha y acede a
hacer lo que Dios a través del profeta había dicho.
El general Naamán según nos dice el
versículo catorce “descendió y se zambulló siete veces en el Jordán”. El nombre
“Jordán” significa: el que desciende, el que baja. Por eso dice que Naamán
“descendió al Jordán”.
Esto nos recuerda la importancia de
descender o bajar, de humillarnos delante de Dios. Nos recuerda cuán importante
es despojarnos del orgullo, de la soberbia y de la autosuficiencia.
2) En segundo lugar podemos concluir que
someternos a la palabra de Dios nos permite alcanzar milagros y múltiples
bendiciones. Debemos destacar la expresión “conforme a la palabra del varón de
Dios”, que fue la palabra de Dios a Eliseo, es decir, cuando decidimos hacer
las cosas como Dios dice siempre nos irá bien, la cosecha será el mejor
resultado, la cosecha será milagros y bendiciones.
Como podemos ver al hacer lo que Dios
había dicho, la piel de Naamán se volvió como la de un niño, nos dice la
Biblia, él quedó limpio. Tal vez hacer ciertas cosas nos cueste, pero sí Dios
lo ha dicho es para nuestro bien y para bendición. El sometimiento a Dios es
una poderosa bendición.
No es difícil imaginarnos el profundo
cambio que hubo en la vida de Naamán, no solo en su piel, sino en su vida
personal, social y familiar; pues la lepra era contagiosa y quien la padecía
debía separarse de su familia y de toda vida social; pero Dios restauró su piel
y su vida. Busca a Dios y clama su poder, él sigue haciendo milagros
3) En tercer lugar: Dios es nuestro
alfarero. El Señor es bueno y misericordioso, él trabaja en nuestro corazón
como el alfarero trabaja con el barro. Con amor y paciencia moldea nuestro
carácter y día a día hace su maravillosa obra. Permitamos al Señor trabajar en
nosotros según su buena voluntad, cosecharemos grandes bendiciones y veremos el
plan de Dios cumplirse en nuestras vidas. El sometimiento a Dios nos permite
alcanzar poderosas bendiciones.
Es muy
importante que aquellas cosas que nos estorban sean expulsadas de nuestra vida,
son como pesadas cargas que nos impiden avanzar y perseverar en el camino de la
fe.
En oración
presentemos nuestro corazón como una ofrenda en la que Dios pueda trabajar con
libertad y hacer su perfecta y buena voluntad. Decidamos rendir nuestro corazón
a Dios y veremos bendiciones y milagros en nuestra vida como nunca antes.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- El sometimiento a Dios es una poderosa bendición -
sábado, 25 de enero de 2020
(La humildad es una virtud
valiosa). La humildad de corazón es una virtud de gran valor, contraria al
orgullo y a la soberbia. La humildad nos permite reconocer nuestras
equivocaciones, así como nuestras debilidades.
Precisamente por eso la
humildad nos facilita acercarnos a Dios, quien mira de lejos al altivo. Es muy
importante despojarnos del orgullo y de la autosuficiencia. La humildad precede
la bendición y promoción que viene de la mano del Señor. Dios pone en lugares
de privilegio a aquellos que le dan el
primer lugar a él. Veamos este importante estudio:
La humildad es una virtud valiosa:
2 Reyes 5:12 “Abana y Farfar, ríos de
Damasco ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos
¿no seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado”.
1) En primer lugar tengamos en cuenta
que Naamán ha venido a la casa de Eliseo para ser sanado de su lepra, pero el
orgullo y el enojo están estorbando recibir aquel milagro. Recordemos que Dios
mira de lejos al altivo, él atiende al de corazón humilde. Así que Naamán está
por aprender una valiosa lección de vida.
Nos enseña la palabra de Dios aquí
que Naamán, el valiente general sirio está siendo probado, él debe tomar
decisiones, pero impulsado por su soberbia, inicialmente no obedece las
instrucciones de Dios a través del profeta Eliseo. La humildad nos permite ver
nuestra verdadera condición y necesidad, el orgullo nos enceguece.
2) En segundo lugar vemos podemos ver el
disgusto de Naamán, pues en el versículo de hoy él menciona dos ríos de
Damasco, diciendo que son mejores que todas las aguas de Israel. Esto ríos son
Abana y Farfar. Los nombres de estos dos ríos nos permiten reflexionar en
algunas enseñanzas muy importantes para poner por obra y otras cosas que
debemos evitar:
La palabra “Abana” significa: hecho
de piedra, pedregoso. Lo que nos muestra que esa es o fue su característica, un
río que tenía y transportaba mucha piedra, un río entonces difícil de atravesar
y navegar. Las piedras precisamente hacen tropezar y obstaculizan el avance de
cualquier balsa o persona.
Sin duda alguna, no hay peor orgullo
que el que no nos deja ver aquello que nos impide avanzar. Por orgullo y
autosuficiencia queremos muchas veces avanzar y conquistar, sin quitar de
nuestra vida aquellas “piedras” que obstaculizan la obra de Dios en nosotros.
Y por supuesto, se requiere humildad
para reconocer lo que está mal en nosotros y permitir que Dios haga su obra en nuestro
carácter.
La palabra “Farfar” significa:
apresuramiento, veloz, rápido. Esto nos recuerda que con frecuencia somos
ansiosos, queremos las cosas rápido. Por lo general no nos gusta esperar los
tiempos de Dios, por el contrario todo lo queremos inmediatamente. Pero esperar
en Dios es lo mejor
3) En tercer lugar recuerda que el
orgullo con frecuencia nos impulsa a desear las cosas rápido para mostrar a los
demás nuestros logros o alcances. El mundo de hoy enseña que el éxito es
alcanzar máximos resultados en el menor tiempo posible, por eso no se valoran
los procesos, sino que se destacan y se anhelan sólo los resultados.
Sin embargo la palabra de Dios nos enseña
diciendo “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte
cuando fuere tiempo” 1 Pedro 5:6. -
La misma Escritura nos enseña que
todo tiene su tiempo, y esperar en el Señor no sólo nos hará recibir las
mejores bendiciones, sino que en el proceso nuestro corazón es forjado para que
seamos más como Cristo. La humildad es una virtud de gran valor y nos facilita
el logro de muchos milagros y bendiciones de Dios.
Te invito a leer:
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria.
- La humildad es una virtud valiosa -
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